No es secreto, lo he dicho mas de una vez, me gusta dejarme sorprender por la vida, y ella es tan generosa que me acerca a las personas que lo hacen posible.
También, en algunos de mis post, creo que mencioné que todos somos herramientas que permitimos vehiculizar ,para otro u otros , el descubrimiento de algo.
Probablemente no seamos conscientes de ello, pero somos necesarios para alguien, y el momento , siempre llega.
A veces creemos tener claro todo y una vida aparentemente organizada, y de repente, como dice el pié de la imagen, nos sorprende "un giro inesperado en la dirección correcta"; quizás no nos demos cuenta que es en la dirección correcta hasta mucho tiempo después, pero vale la pena que suceda.
En otras oportunidades perdemos de vista aquello que es lo mejor para cada uno, paralizados por un miedo a lo desconocido que queremos evitar porque no queremos sufrir, o simplemente, porque no nos atrevemos.
A nuestro alrededor hay personas maravillosas que no vemos hasta ese instante mágico en que deben aparecer ,y cuando sucede, el vértigo asusta un poco.
Pero superado ese minuto cero, todo se da de manera natural.
Creo que hay que prestar atención a esas personas y a esos instantes.
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